La marioneta
17 enero 2007 por tetxu
Si por un instante Dios se olvidara de que soy una marioneta de trapo, y me regalara un trozo de vida, posiblemente no diría todo lo que pienso, pero en definitiva pensaría todo lo que digo.
Daría valor a las cosas, no por lo que valen, sino por lo que significan.
Dormiría poco, soñaría más, entiendo que por cada minuto que cerramos los ojos, perdemos sesenta segundos de luz.
Andaría cuando los demás se detienen, despertaría cuando los demás duermen, escucharía mientras los demás hablan, y cómo disfrutaría de un buen helado de chocolate.
Si Dios me obsequiara un trozo de vida, vestiría sencillo, me tiraría de bruces al sol, dejando al descubierto, no solamente mi cuerpo sino mi alma.
Dios mío, si yo tuviera un corazón…..
Escribiría mi odio sobre el hielo, y esperaría a que saliera el sol.
Pintaría con un sueño de Van Gogh sobre las estrellas un poema de Benedetti, y una canción de Serrat sería la serenata que le ofrecería a la luna.
Regaría con mis lagrimas las rosas, para sentir el dolor de sus espinas, y el encarnado beso de sus pétalos…
Dios mío, si yo tuviera un trozo de vida ….
No dejaría pasar un solo día sin decirle a la gente que quiero, que la quiero.
Convencería a cada mujer u hombre de que son mis favoritos y viviría enamorado del amor.
A los hombres les probaría cuán equivocados están al pensar que dejan de enamorarse cuando envejecen, sin saber que envejecen cuando dejan de enamorarse.
A un niño le daría alas, pero dejaría que él sí aprendiese a volar.
A los viejos les enseñaría que la muerte no llega con la vejez sino con el olvido.
Tantas cosas he aprendido de ustedes los hombres..
He aprendido que todo el mundo quiere vivir en la cima de la montaña, sin saber que la verdadera felicidad está en la forma de subir la escarpada.
He aprendido que cuando un recién nacido aprieta con su pequeño puño por vez primera el dedo de su padre, lo tiene atrapado para siempre.
He aprendido que un hombre únicamente tiene derecho de mirar a otro hacia abajo, cuando ha de ayudarlo a levantarse.
Son tantas cosas las que he podido aprender de ustedes, pero finalmente de mucho no habrán de servir porque cuando me guarden dentro de esta maleta, infelizmente me estaré muriendo.
Johnny Welch.
Ups!
Besines de Colorines!
Interesante texto. Me gusta las reflexiones que hace.
Creo que hoy por hoy nos preocupamos más de exteriorizar nuestra felicidad que de vivirla. Queremos vestir de marcas caras, un chalet enorme en el mejor barrio de la ciudad, un coche lujoso y un yate en el puerto… Pero nos olvidaos del jersey que nos hace la abuela por navidades con todo su cariño, del pisito que vimos con nuestra pareja y que aunque estemos hipotecados hasta las cejas, nos gusta porque es nuestro, del coche modesto que nos regalaron nuestros padres por sacar buenas notas o de un paseo de media hora en las barcas del Retiro…
Y espero que me perdones después de semejante rollazo.
Besines de colorines a ti también!
Cuánta razón tienes Artemis… nos pasamos el día pensando en lo que nos falta y no en cuánto tenemos. Hay que acordarse de vez en cuando de valorar también las pequeñas cosas…
Opino como Artemis, y ojo que hay veces que la corriente del capitalismo me arrastra y yo me dejo arrastrar tambien, todo hay que decirlo,pero luego me doy cuenta que esa no es la realidad que yo quiero vivir, no esta en mi esencia el tener mas si no el compartir mas, y aunque suene hortera o ridiculo es la verdad. Sigo luchando en la vida eso si, pero no para tener un mejor coche o comprar un bolso mas para la coleccion si no para realizarme como persona, sigo luchando por conseguir el trabajo que siempre quise, para no ser conformista y cumplir mis deseos, con sudor y con esfuerzo para que luego me sepa a gloria. (uy me he dejado llevar y he terminado hablando de mi misma, sorry 🙁 )
Gracias, chicas!
Ladybird, non ti preocupare! A veces no tiene nada de malo hablar de un@ mism@. Es más, a veces las experiencias propias sirven para desahogarnos y reconfortar o abrirle los ojos a alguien.
Un saludo!
el texto muy interesante y muy acertado ya que nos dedicamos a quejarnos y a pensar todo lo que no etnemos y dejamos al olvido lo que sí tenemos.
iría bien reflexionarlo…
bsos!!